Caminando por valles oscuros, un relato del jesuita Walter J. Ciszek. Nos narra sus años en la prisión moscovita de Lubianka durante la II Guerra Mundial y los siguientes 15 transcurridos en un Gulag de Siberia.
Ciszek nos abre su mundo interior y espiritual, mostrando cómo afrontó estas dificultades, buscando humildemente la voluntad de Dios. De esta experiencia de vida extrajo profundas reflexiones en torno al valor del cuerpo, el apostolado, la dignidad del trabajo, la libertad, etc. Una vida cristiana donde las palabras de fe no eran posibles y primaba así el testimonio cotidiano.
«En realidad, la palabra clave de nuestro apostolado sacerdotal en los campos tenía que ser “testimonio”. No se trataba tanto de predicar a Dios o de hablar de religión a los hombres que tratábamos como de vivir la fe que profesábamos».